Mi juez interno me señaló con un martillo de madera y su peluca creó una nube de talco cuando furioso se inclinó hacia mí
¿CUÁL ES TU EXCUSA?
Con los ojos cegados por un foco repentino en mi cara y tosiendo a causa del talco tuve que confesar... "¡NO tengo excusa!"
Antes aún podía refugiarme detrás del enorme cartel de "TENGO EXÁMENES", pero los exámenes los acabé hace más de una semana y entonces, ayer llegó el momento en el que me dije: "Nuria, acabar el año y que no hayas actualizado el blog por estar por ahí de fiesta es una indecencia, indecoroso, incívico, anticonstitucional si me apuras"
Así que no os preocupéis todos aquellos a los que os obligo a leerme cada vez que saco una entrada, volveré a haceros sentir incómodos una vez más preguntándoos si habéis leído mi nueva chorrada.
Veamos, que ha pasado desde que no escribo aparte de un posible fin del mundo... pues por mi cocina no muchas cosotas. Vayamos por partes:
PROYECTO DE HALLOWEEN ABANDONADO
Halloween, perder horas de estudio completas por buscar recetas a cada cual más terrorífica y alucinante.
Al final no hice una miseria con respecto a lo dulce. Era un chasco, pero gracias a que Diego me insistió para que hiciera algo que aún se podía acabamos cenando calaveras de arroz.
No era lo que tenía pensando pero la verdad quedaron terrorícas. Tiene una pinta asqueroseta pero estaban de muerte. (Aplauso por mi chistaco de Halloween)
CLASE DE CUPCAKES (10 de Noviembre)
En efecto, antes de renunciar a la vida social para estudiar y suspender, una chica muy maja con un blog chachi guachi (http://publikda.espacioblog.com/) depositó su confianza en mí para que le enseñase unos pequeños trucos en la cocina.<-- Veis, hasta un dossier con la portada en color y todo. ¡Tirando la casa por la ventana!
 |
| mira como sonríe, y eso que no la chantajee ni nada |
CUMPLEAÑOS
Llegó mi cumpleaños y la gente me preguntaba que qué super-tarta iba a hacer para celebrarlo. Pues obviamente la mejor tarta de cumpleaños del mundo: la de galleta y chocolate.
Cualquier persona que desconozca la receta que me avise que se la cuento encantada, aunque de buenas a primeras no lo hago porque creo que la receta de esta tarta es casi cultura popular, patrimonio de la humanidad. Por lo menos en Galicia.
Mi mamá me mima, amo a mi mamá que me hizo una tarta de galletas riquísima para mi cumple. Pero bueno, cuando lo celebré con los amigüitos, para hacerla un poco especial decidí hacerla tamaño gigantesco. 2 tabletas de chocolate, 5 paquetes de galletas y 1 sobre de flanín.
Pudiera ser que alguno de los pensamientos que cruzase vuestra mente ahora mismo fuese "¿por qué un langostino y eso?"
Y el parecido es asombroso.
Y para seguir tienen su razón de ser. También se celebraba el cumpleaños de Andrea y de Diego. Andrea es alérgica al marisco y no puede comer langostinos... y Diego no traga a Julia Roberts!!!
¿no? ¿no hay risas? ¿ni aplausos? ¿ni una triste tos incómoda?
No tenéis sentido del humor.
ENCARGO NAVIDEÑO
Pues resulta que una fan (me siento cuan estrella hollywoodiense) del blog me hizo un encargo de Navidad. Para ser más exactos es fan de las cupcakes de Triki, pero redondeando así para arriba se puede decir que es fan del blog, una groupie mía incluso, a punto de ser denunciada por rebuscar en mi basura. (Creo que nunca más me va a encargar nada)
 |
| copos de nieve hechos en pan de oblea uno a uno |
La tarta era aleatoria, yo tenía todo el poder de decisión en mis manos, lo único que dejó caer varias veces fue que las tartas de chocolate están muy ricas. Y yo, que soy una lumbrera leí entre líneas y deduje "quiere una tarta de chocolate".
Así que manos a la obra. Una tarta de dos pisitos. El piso de abajo bizcocho de naranja y el piso de arriba de chocolate. Todo recubierto de ganaché de chocolate 60% de cacao.
Que cosa más frustrante de día. Tuve que tirar los dos primeros bizcochos que hice porque eran una mezcla entre quemado y crudo... y lo peor es que no sabía ¡¡POR QUÉ!!.
Mi teoría es que el horno estaba despechado conmigo por el abandono sufrido y se quiso vengar.
Por repetir el bizcocho me puede dar más o menos rabia hacerlo, pero por tirar esa comida... la verdad es que me dolió en el alma.
El horno debió darse cuenta de que estaba siendo malvado y cruel y ya me dejó cocinar en paz.
Los muñecos que veis en la parte de arriba no son la cosa más navideña que cabría esperar, I know it, peeeeeero es que son personalizados. Son cosicas de ella.
Al final no sobraron ni las migas, así que podemos finalizar este post con una sonrisaza de orgullo y satisfacción en la cara.
¡Espero que con el nuevo año que entra publique algo de cocina en realidad y así podáis cocinar algo rico rico!
¡¡FELICES FIESTAS!!
